RIZOS
Los que no tenemos "un pelo de tonto" no podemos tener
RIZOS
En aquellas personas que conservan sus rizos,
el pelo puede dar señales varias:
Los rizos pueden ser prueba de una pasión desenfrenada:
Tu cabello y el mío se han enreao
como la zarzamora por los vallaos
Antonio Núñez "Chocolate" y Juan Carmona "Habichuela" (Romeras)
Shakespeare necesitó una tragedia para hablar de los celos,
el flamenco lo hace en tres versos:
La noche del aguacero,
dime donde te metiste
que no me mojaste el pelo
Manuel Soto "Sordera" con Parrilla de Jerez (Soleares)
Una trenza puede ser la escala trepadora para un canario:
Por las trenzas de tu pelo
un canario se subía
y se paraba en tu frente
y en tu boquita bebía
creyendo que era una fuente
Bernardo el de los Lobitos con Luis Maravilla (Malagueña)
Y hasta puede ser objeto de una última voluntad,
a veces imposible,
pues los rizos de una gitana se podían cambiar por un pan,
por un vestido o un par de medias
Cuando yo me muera,
te pido un encargo
que con las trenzas de tu pelo negro
me amarres las manos.
Manolo Caracol con Melchor de Marchena (Seguiriya)
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